jueves, 6 de septiembre de 2012

Condición necesaria y suficiente.

Muchachos, me da mucha pena que el blog haya estado congelado durante tanto tiempo, pero de verdad que ahora no ha quedado nada en mí, sé que dije que en el mes de febrero comenzaría lo mero mero, pero por razones de fuerza brutal, no más no, de hecho ahí tengo como unos diez escritos a medias con contenido chingón para usted y muchas más ideas para llenar este polvoriento congal con humor de retrete.

Ahora que recuerdo, también dije que iba a mudar de blog, es decir, redireccionar TODAS las imágenes y posts, pero caí en cuenta de que con mis nuevas “responsabilidades” aquella tarea, aparte de ser casi titánica, pasaba a ser una actividad que me daba muchísima hueva, así que en estas semanas, le pediré a alguien que gracias a dios (sí, con minúscula), le sabe mover chingón al HTML le haga unos pequeños ajustes y el blog ya no se vea TAN de la verga.

Pasando a otro orden de idas. Debido a los recientes acontecimientos (sobre todo escolares [¿ya notaron que me encantan los paréntesis?], me he decidido que debo tener prioridades. Y es que es bien pinche raro, porque es cuando uno tiene más cosas que hacer y dejas de lado muchas otras, ahí es que te das cuenta de que has madurado. Por ejemplo, ahora pongo primero la escuela que a las fiestas o a mi deliciosa droga.

Y ya que estamos llevando el tema de anteponer ciertas cosas a otras, estoy totalmente comprometido, pero ahora sí de a ‘devis’, no como los compromisos que he venido haciendo al estilo Pena Miento prácticamente desde que abrí el blog, la razón es de suma importancia, no obstante, por razones de “seguridad” no lo revelaré hasta que ya esté en camino.

Bueno pues, para que no les arda la colita (ajá), la idea acá, es publicar una novela, el pedo aquí es que, como todo buen texto, debe cumplir con ciertas características: contexto y demás chucherías literarias. Si usted tiene un poco desarrollada su habilidad de deducción, ya se habrá dado cuenta de que mis deseos por darle a la ‘escribida’ son para desarrollar mi habilidad de redacción, (por eso llamé así el post) para poder darle sabor y estilo a la obra literaria que tengo en mente, y entre otras cosas, evitar tantos paréntesis y palabras como ‘escribida’.

Pasando a otro orden de ideas importante. Uno de los escritos que ya tenía en mente era una especie de “análisis” (nótese el entrecomillado) a uno de los lugares que más he detestado en la vida, pero que, irónicamente, me ha brindado sonrisas como pocos, estoy hablando de la facultad de ingeniería (también nótese que dicha facultad no goza de los lujos de las mayúsculas).

Ya tenía más de la mitad del texto escrito, pero caí en cuenta de que no era bueno, ya que era una amalgama de comentarios ácidos, traumas personales y comentarios desdeñosos para gente que en realidad, hace las cosas bien. Sólo un ingeniero sabe cómo están las cosas en su facultad, y aunque no lo creas, no lo podría redactar.

Por eso decidí comenzar de cero, pero ahora con ambos puntos de vista para que quede como mi tilín me dictó. Pues ahora sí, esperen un post cada semana o semana y media depende de cómo estén las aguas.